COLADA

La colada o lejía, se hacia un par de veces al año, a finales de Mayo y en Septiembre. Durante el año guardaban la ceniza del hogar o del horno de cocer el pan, la limpiaban para que quedase bien pulida, ya que, cuanto más pulida fuera la ceniza, más blanca quedaría la ropa.

Para lavar la ropa primero se enjabonaba y aclaraba en el labadero; después la colocaban en una gran cesta de mimbres, encima de la ropa se colocaba una sábana gruesa (vieja) para que hiciera de filtro, la ceniza se colocaba sobre ella. La cesta  se ponia  dentro del "cociol" (un tinaja especial  con un agujero en la parte inferior en la que se insertaba un caño)

Al lado se preparaba un fuego donde se hervía el agua, que se vertía en la cesta. El agua hirviendo arrastraba los componentes de la ceniza filtrados a través de la sábana, se deslizaba entre la ropa hasta salir por la parte inferior, Esta agua se recogía en recipiente que se colocaba debajo del caño, se volvía a hervir y de nuevo se vertía en la cesta. Así una y otra vez, hasta que la ropa quedaba blanca, después tendían la ropa en las eras y la blancura se acentuaba con los rayos del sol.

Este era un trabajo femenino, duro y olvidado, tambien un oficio, las labanderas. Todavia viven muchas de las mujeres que lo realizaban, puedo decir sin temor a equivocarme que para todas ellas el mayor invento de la modernidad a sido la labadora